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Warmi Masi: solidaridad y trabajo en la Villa del Bajo Flores
En palabras de nuestro Papa Francisco, “La vida está entretejida de actos de respeto y generosidad que no solo compensan el mal, sino que nos empujan a ir más allá y a estar llenos de esperanza”.
Escribe Nazareth D’Amico
Warmi Masi significa “mujeres compañeras” y da nombre a un conjunto de mujeres del Barrio Padre Ricciardelli (ex Villa 1-11-14) que se organizaron para desarrollar emprendimientos productivos y económicos que les permitan perseguir la autonomía económica y el desarrollo personal a través de la elaboración de productos sustentables.
Las mujeres de Warmi Masi están organizadas en tres unidades productivas: Warmi Masi textil que confecciona productos de gestión menstrual (toallitas y protectores diarios de tela reutilizables); Warmi Masi tejido, productos de uso cotidiano reutilizables y sustentables de algodón y yute para baño y cocina (esponjas y rejillas de vajilla, esponjas de baño para el cuerpo de diferentes usos, discos desmaquillantes, portajabones, toallitas para la cara, etc.) y WARMI MASI panadería y otras masas que produce pan, galletitas, pastafrolas, budines y pre pizzas.
Las mujeres que forman parte de estos emprendimientos venían realizando tareas comunitarias en comedores y merenderos y decidieron profundizar y consolidar sus lazos para trabajar y poder generar sus propios ingresos.
Debido a que estas mujeres sostienen también las tareas de cuidado en sus hogares -como la mayoría de las mujeres en nuestra sociedad- el hecho de poder desarrollar las tareas laborales en su propio barrio, cerca de sus familias, es de gran importancia a la hora de sostener su espacio de trabajo remunerado. La mayoría de las mujeres que forman parte de Warmi Masi son el único sostén del hogar.
Los productos de Warmi Masi tienen múltiples ventajas: no sólo hace que mejore la calidad de vida de las mujeres que conforman estos emprendimientos, sino que además es un aporte para repensar el consumo diario de productos que dañan el medio ambiente y poder elegir productos sustentables para el ambiente y para la sociedad.
Las mujeres de Warmi Masi se organizan a través de las redes para comercializar sus productos y la venta es parte también de las tareas que se abordan colectivamente.
Este tipo de emprendimientos desarrollan nuevas formas de producción y consumo en nuestra sociedad, a la vez que contribuyen a ampliar la oferta de productos sustentables para las personas y para el cuidado del ambiente.
Es de vital importancia empezar a conocer y difundir nuevas formas de trabajo. El trabajo cooperativo, el trabajo colectivo, el asociativismo, son herramientas muy potentes que generan desconcentración de la riqueza en un pequeño grupo, integrando a personas y grupos que propician el desarrollo y la expansión de sus potencialidades, en contextos tanto sociales como económicos de carácter solidario, participativo y justo, aspectos necesarios para la transformación de nuestra sociedad.
Este grupo conformado por 10 mujeres se basa en los valores de ayuda mutua, responsabilidad, democracia, igualdad, equidad, solidaridad y sustentabilidad. Creemos que el desarrollo personal sólo se puede lograr en la unión con otras personas, trabajando juntas para un mismo fin, con una perspectiva de género y ambiental.
Estas mujeres no sólo le ponen el cuerpo todos los días a su trabajo cooperativo, al cuidado de sus hijos/as, sino que mantuvieron en pie a su comunidad en medio de la crisis sanitaria por la pandemia del Covid-19. Sin el rol de estas mujeres en las organizaciones que sostienen esta red de cuidado comunitario hubiera sido imposible sobrellevar esta crisis, no solamente en términos de asistencia alimentaria, sino también de estrategia sanitaria en el barrio, promocionando el cuidado y la salud de sus vecinos/as.
El Barrio Ricciardelli, ex villa 1-11-14 -territorio perteneciente a la comuna 7- de donde son estas mujeres, ha sido golpeado fuertemente por el neoliberalismo y por la actual crisis de Covid-19. Es uno de los más grandes barrios populares que tiene nuestra Ciudad de Buenos Aires y es uno de los más olvidados por las políticas locales y por los gobiernos del PRO que vienen gobernando hace más de 12 años este territorio. Un territorio que necesita más que nunca de una reurbanización, infraestructura, servicios y condiciones de vida dignas y saludables como tiene la mayoría de las personas que viven en la ciudad más rica del país.
Seguimos tejiendo redes en nuestro barrio, en nuestra comunidad, por eso agradecemos y valoramos el espacio de difusión al periódico de Flores y seguimos avanzando.
